Muchos habéis escuchado que si estás sano por dentro lucirás bien por fuera, y ello es una realidad que debemos recordar siempre que buscamos mejorar nuestra estética. Por eso, si quieres detener la caída del cabello y lucir un pelazo, te contamos que una buena dieta puede ayudarte.
Dime qué comes y te diré cómo está tu pelo
Desde hace tiempo atrás se sabe que determinadas condiciones biológicas, enfermedades o estados de nutrición pueden influir grandemente en la salud de nuestro pelo y también, en su apariencia.
Así como una enfermedad crónica, el alcoholismo o la edad avanzada pueden debilitar nuestro cabello o producir cambios en el mismo y hasta ser causante de su pérdida, una mala alimentación que ocasione deficiencias nutricionales también puede provocar tales daños.
Nuestro cuero cabelludo como toda nuestra piel necesita de diferentes nutrientes y demás cuidados que favorezcan su salud y así, den origen a un pelo fuerte, con brillo y bajo todo punto de vista saludable. Por lo tanto, tu cabello como otras partes de tu cuerpo son el reflejo de tu estado de salud que puede cuidarse con una buena dieta.
Si tu desde hace tiempo sientes que tu cabello se debilita y se cae, quizá sea momento de analizar tu estado nutricional o bien, tu alimentación, pues una dieta adecuada puede ayudarte a detener los daños y revertir la caída de tu pelo.
La dieta que puede ayudarte a detener la caída del cabello
Aunque está claro que para cuidar la salud del organismo entero y lucir bien por fuera es necesario una dieta equilibrada y completa en la cual no sobren ni falten ningún nutriente, la ciencia ha demostrado que determinados componentes en particular pueden ayudar a detener la caída del cabello.
Así, tras analizar diferentes estudios al respecto, se ha comprobado que el nivel de hierro del organismo puede ser clave para cuidar el cabello y prevenir o revertir su caída.
Niveles bajos de hierro y su depósito en el organismo están asociados a pérdida de cabello al igual que el déficit de un aminoácido llamado lisina, un aminoácido esencial que podemos encontrar en proteínas de buena calidad tales como las de las carnes, el huevo o los lácteos y otros alimentos de origen animal.
El hierro, podemos obtenerlo de verduras de hojas verdes, de carnes rojas, morcilla, hígado o mejillones, para cuidar que este mineral no falte en nuestra dieta habitual.
Por otro lado, la falta de ácidos grasos esenciales también se han vinculado a cambios de pigmentación, debilidad o pérdida de cabello, nutrientes que pueden encontrarse en falta en una dieta pobre en calorías o mal planificada y que podemos obtener fácilmente consumiendo aceites vegetales, frutos secos, semillas o pescados azules.
Asimismo, una caída en los niveles de zinc y en biotina pueden predisponer a la caída del cabello, pues se ha observado una asociación entre éstos que nos dice que lo mejor es cuidar la ingesta de ambos nutrientes si queremos contribuir con nuestra dieta a prevenir la alopecia.
La biotina, una vitamina hidrosoluble, podemos encontrarla en diferentes alimentos, entre ellos, el huevo, los guisantes, las nueces, el hígado y otros, mientras que el zinc lo podemos encontrar en frutos secos, legumbres y granos enteros en general, así como también en las carnes.
Como podemos ver, no son pocos los nutrientes que debemos cuidar en nuestra dieta para que, junto a otros hábitos saludables que protejan la salud, nos ayuden a detener la caída del cabello.
Para no olvidar
Si bien una dieta sana resulta clave para proteger la salud y cuidar al organismo por fuera y por ello, puede ayudarte a detener la caída del cabello, debes saber que no es el único factor que debes tener en cuenta.
Otros factores que predisponen a estados nutricionales alterados tales como enfermedades cardíacas, cáncer, adicciones u otras, y también, una mala higiene o escasos cuidados del cabello pueden ser la causa de la debilidad y caída del mismo.
Por eso, si quieres detener o prevenir la caída del cabello, una buena dieta puede ayudarte pero también, debes tener en cuenta otros factores para obtener verdaderos resultados.
Bibliografía consultada | Clinics in Dermatology, Volume 28, Issue 4, July–August 2010, Pages 412–419; Clinical and Experimental Dermatology, Volume 27, Issue 5, July 2002, Pages 396–404; Dermatologic Clinics, Volume 31, Issue 1, January 2013, Pages 167–172; European Journal of Paediatric Neurology, September 2009,Volume 13, Issue 5, Pages 439–443.
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