Una llamarada. Un fogonazo de los colores rojo (universitario) y carmesí intenso se ha apoderado de las Nike Flyknit Racer. Unas zapatillas extremadamente ligeras, adaptables y casi sin costuras. Confeccionadas a través de una máquina de tejer patentada que permite desarrollar un tejido que minimiza su peso.
Un lanzamiento que ha coincidido con la llegada del Año del Gallo de Fuego Rojo. Un guiño global a los consumidores chinos que estos días hacen del color rojo (del fuego) un fetiche de la buena suerte, la vitalidad y la felicidad.